Esta es la casa original, con más encanto y más historia, 100 años ha trabajado la familia en esta forja, no estoy seguro de que este tipo de “factorías” hayan eliminado el hambre del municipio en los años 40 al 60 del siglo pasado pero al menos la han atenuado.
La retranca de quién le da nombre a la casa debería estar recogida y protegida como bien cultural, lástima que ese “arte” tan ligado a la cultura de los Ferreiros es único e intransferible. La miseria material no siempre está ligada a la espiritual, como él decía alguna vez, “hay gente mucho más pobre que nosotros, tanto que algunos solo tienen dinero…”
Justo en la alfombra se encontraban las dos muelas de afilar hasta los años 60, a la derecha de la mesa estaba el yunque y la forja de carbón con su fuelle manual.
Todos los meses hay alguna mejora, que si un sofá, que si un aplique, que si un pequeño detalle, que si otro caprichito de la “decoradora”, en fin, más de una vez me he preguntado si me favorecería una mayor flexibilidad del mercado laboral en España para poner en su casa a quién dirige tantos cambios pero siempre termino callando y bajando la cabeza por la cuenta que me tiene…
En este espacio se asentaban las muelas de afilar y justo enfrente había un armario dónde se guardaban los calendarios de liga de los años 50, con la delantera del Bilbao de Zarra, Venancio, Gainza, Iriondo y Panizo y el Oviedo de Lángara.
También se encontraba en ese armario la biografía de Caryl Chessman que seguramente he leído más de 10 veces, terminó dándome pena, mucha pena…
La cocina tiene inducción, lavavajillas, micro y nevera Smeg. Solo le falta un buen chef para poder aprovechar la excelente materia prima que encontramos en la zona. Los excesos con moderación están permitidos, al fin y al cabo estar en TAReira es relajarse, pasear y permitirse algún capricho culinario.
Las habitaciones están en la primera planta, mas cerquita del Cielo. En ellas podemos decir que se duerme en la Gloria, no confundamos con dormir con Gloria, no son excluyentes, solo diferentes.
La última inspiración de la “decoradora” ha sido adornar la cama con esa especie de corona real, dice que quienes nos visitan merecen encontrarse como reyes. Manolo, de Carpintería Penedo, convirtió en arte la idea, mi contribución solo ha sido colgarla me refiero a la corona no a la decoradora, of course.
Cerca de la Gloria está la habitación de los angeles, algodón 100% tacto suave, blanco con bordados, el sonido suave del río…zzzzzz.
Por último, la sala de reposo…